Hoy les traigo un bonito copy-paste de un blog en donde también participo (este). Si leíste mis entradas anteriores entonces tienes que leer esta que si tiene información interesante, sobretodo si vives en el D.F.
...y no morir en el intento
En él, nos conocemos, viajamos, recibimos nuestra dosis de cultura musical y retamos nuestro nivel de tolerancia; le compramos el regalo al sobrino, primo, o hijo; adquirimos nuestro periódico del día, masaje o hasta conocimos a la pareja ideal. Estoy hablando nada más y nada menos que del “metro” que después de 40 años es ya de la familia; sin embargo y según nuestra experiencia aun no sabemos usarlo, por lo cual decidimos armar la maravillosa
“Guía básica de supervivencia en el metro” (con humanismo)
1. Más vale prevenir que… hacer fila
Si aun no cuentas con tu tarjeta del metro (por la nostalgia que te daría dejar la tradición de comprar boletos) y eres usuario frecuente, es recomendable que adquieras los boletos de toda la semana, con esto evitaras molestas filas. Véase estaciones como Hidalgo, Buenavista, Bellas Artes, entre otras.
2. Ni tanto que queme al santo, ni tanto que no lo alumbre.
La frase, es de las más famosas, aparece arriba de cada una de las puertas del metro pero parece que aun no la alcanzamos a comprender “antes de entrar permita salir”. Si tienes mucha prisa…lo peor que puedes hacer es ponerte todo loco, porque por eso luego se lastima la gente (véase estaciones San Lázaro e Hidalgo) hay que entrar rápido pero en orden.
3. Hablando de maletas, bultos y mochilas
Ok, es inevitable, irás de campamento y te tocó llevar hasta la cazuela, ahora eso no justifica que dejes tu backpack a medio pasillo. También sabemos que no tienes ojos en la espalda, pero creemos que tienes la capacidad para imaginar el espacio que ocupa la mochila detrás tuyo.
4. Más vale pedir permiso que cachetada por arrimón
Sobretodo para los que se hacen llamar “hombres” en toda la extensión de la palabra. No te cuesta nada abrir la boca y articular algunas palabras para pedir permiso y poder pasar ¿verdad?, controla un poco tu instinto animal y muestra un poco de educación y gentileza.
5. Estás viendo y no ves…
Otro letrero que para muchos pareciera ser invisible…el de RESERVADO, quizá no lo hizo el mejor diseñador, pero seguro entiendes que es una señora embarazada, una señora con un bebe, un ancianito y un discapacitado.. ahí esta, no nos hagamos…así que si estás ocupando ese lugar levántate y ps ya sabes qué sigue; a menos que seas de esas personas de los dibujitos.
6. ¿Más despistado que girasol en eclipse?
Pa´ que no te pase eso es mejor que tengas planeada la ruta (correspondencias y transbordes) y poder llegar a tiempo, sano y salvo a tu destino. Toma en cuenta rutas alternas por si llega a pasar algún accidente o imprevisto.
7. ¡Te rechina la bisagra!
Sabemos que es tiempo de ahorrar agua…que la vida en la ciudad va muy rápido y a veces no nos da tiempo de bañarnos, pero es elogiable uno que otro jicarazo y una pasada de desodorante.
8. Lo cortes no quita lo valiente
En tiempos postmodernos un poco de cortesía, trato amable y hasta caballerosidad (aunque sea por hacer la gracia) no estaría de más. Total, todos somos vecinos y aquí nos tocó vivir.
9. Seguridad
Evita circular solo a altas horas de la noche sobre todo en transbordes y paraderos, (véase transborde en La Raza, y paradero Pantitlan)
10. Tolerancia
Este es quizá el punto más importante para poder tener un viaje agradable, somos muchos en la ciudad y todos con la necesidad de transportarnos, así que ármate de paciencia, se tolerante y disfruta el paseo.
¡BUEN VIAJE!
¡Hasta la próxima!
mmmm
ResponderEliminargracias por el comentario xD
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